LUISA DE MEDRANO, DE ATIENZA, LA PRIMERA
MUJER CATEDRÁTICO DE LA HISTORIA
Tomás Gismera Velasco
Si tuviésemos ocasión de viajar en el tiempo, hasta la Atienza del siglo
XV, tendríamos la oportunidad de conocer una localidad distinta, entonces una
de las principales villas de Castilla habitada por familias que dejaron su
nombre en la historia.
Una de aquellas fue la de los Bravo de Laguna, o de Lagunas, llegada con
Garci Bravo del que la historia nos cuenta fue Alcaide del castillo y origen de
una saga que se mantuvo en la población hasta los albores del siglo XVIII.
Por supuesto que Garci Bravo no llegó sólo, lo hizo con toda su familia,
esposa, hijos y yernos. Acompañado de, entre otros, su hija Magdalena Bravo de
Lagunas y el marido de esta, Diego López de Medrano, y si hacemos caso a las
crónicas genealógicas, a estos les acompañarían al menos tres hijos y dos
hijas, Diego, Garci, Luis, Catalina e Isabel. En Atienza le nacerían al
matrimonio, al menos, otros cuatro hijos, entre ellos, el 9 de agosto de 1484,
nuestra protagonista, Luisa de Medrano y Bravo de Lagunas.