jueves, marzo 26, 2015

LOS TRABAJOS DE CERROPOZO, EN ATIENZA



LOS TRABAJOS DE CERROPOZO, EN ATIENZA

   En los primeros días del mes de junio de 1929, Atienza saltó a la prensa de toda España a través del descubrimiento de la hasta entonces, una de las más importantes necrópolis ibérica hallada.
   Se produjo mientras se llevaban a cabo las labores de apertura de la carretera de Atienza a Hiendelaencina.
   La noticia de alcance decía:

   Durante los trabajos de construcción de la carretera que lleva desde la villa de Atienza a Hiendelaencina, y al efectuar unas excavaciones profundas, fueron encontradas unas armas antiguas.
   Examinadas por el cura párroco de la iglesia de la Trinidad, don Julio de la Llana, manifestó que todo hacía presumir que se trataba de una antigua necrópolis.

   Se dio aviso del hallazgo al arqueólogo Sr. Cabré, quien ayudado por don Justo Juberías, párroco de Membrillera, dieron comienzo, comisionados por el Estado, a las excavaciones oportunas, las cuales han dado como resultado haber comprobado el carácter de la necrópolis, por el descubrimiento de una sepultura in situ, con sus ajuares, de la segunda Edad del Hierro.
   Además, en la estratigrafía de aluviones antiguos cuaternarios de la vega llamada La Bragadera, encontraron dos hachas características del periodo chelense la una, y achalense la otra.

   Los trabajos continuaron a lo largo detodo el verano, con la intervención directa de don Juan Cabré, don Justo Juberías, los hijos del Sr. Cabré y un conjunto de obreros contratados para llevar a cabo los trabajos, procedentes de Atienza y el vecino pueblo de Naharros. Contando igualmente con la presencia del  propietario  de  las tierras,  don  José Gamboa, de Sigüenza.

   La mayoría de las piezas encontradas pasaron a engrosar la colección del Museo Arqueológico Nacional, descubriéndose cerca de cincuenta enterramientos con sus correspondientes ajuares.
   De todo ello tomó pruebas gráficas don Juan Cabré, a fin de elaborar el estudio correspondiente, editado unos años después.

   En aquel trabajo se insertaron algunas imágenes de los trabajos. Recientes estudios han dado a la luz la colección gráfica completa de aquellos, en las que aparecen las personas que trabajaron en Cerropozo.
   Justo es, ya que disponemos de ellas, darlas a conocer, al menos para que su imagen nos recuerde que colaboraron en aquellos trabajos, aunque no los podamos identificar con nombres y apellidos.